ELABORACIÓN

Se congela el pulpo previamente para que esté blando durante 24 horas al menos, o comprarlo congelado.
Se descongela a temperatura ambiente.
Se limpia de restos y arena que pudiera tener.
Una vez descongelado se cuece, entero y con su piel, en abundante agua con la hoja de laurel y algo de sal.
Se comprueba que esté blando hundiendo una aguja gruesa o la punta de un tenedor en el pulpo.
El tiempo de cocción es aproximadamente de media hora por kilo, pero puede variar.
Cuando esté cocido se saca del agua y se corta a tijera en rodajas de un centímetro aproximadamente de gruesas.
En una cazuela plana de barro calentamos el aceite.
Cuando empiece a humear apagamos el fuego y añadimos la guindilla partida en tres o cuatro trozos si queremos un toque picante.
Añadimos los ajos picados.
Añadimos las colas crudas de las gambas.
Las dejamos hacerse en el aceite caliente durante tres minutos.
Añadimos el pimentón mezclándolo todo bien.
Encendemos de nuevo el fuego y añadimos el pulpo.
Se rehoga todo a fuego medio durante cinco minutos y se sirve.